España ha asumido un papel pionero en el desarrollo de una IA ética, segura y confiable. La Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), presentada en 2021, marcó seis ejes prioritarios:
El programa España Digital 2026 complementa esta estrategia con metas concretas:
Además, España ha impulsado el Centro Nacional de Supervisión Algorítmica, que velará por el uso ético y transparente de los algoritmos en los sectores público y privado. Esta iniciativa, pionera en Europa, refuerza la confianza ciudadana y promueve una IA responsable al servicio del bien común.
En el ámbito europeo, nuestro país ha apoyado activamente el Reglamento de Inteligencia Artificial (AI Act), que establece normas sobre el uso de sistemas de alto riesgo, transparencia y derechos de los usuarios.
Impacto macroeconómico estimado de la IA en España (2025–2035)
| Dimensión | Impacto estimado | Ejemplos de aplicación en España |
|---|---|---|
| PIB y productividad | +15.000 M € anuales (≈1,5 % del PIB) | Automatización industrial, banca digital, logística inteligente. |
| Empleo | Transformación del 12 % de los puestos de trabajo; creación de nuevos perfiles tecnológicos. | Analistas de datos, supervisores de IA, diseñadores digitales. |
| Sectores líderes | Energía, salud, turismo, movilidad, agricultura. | Iberdrola, QuirónSalud, Meliá, Renfe, Hispatec. |
| Inversión pública y privada | >2.000 M € en programas de IA y digitalización. | Fondos europeos, España Digital 2026, hubs regionales. |
Tabla que muestra los principales indicadores económicos de la adopción de inteligencia artificial en España: incremento del PIB, transformación del empleo, sectores con mayor impacto y volumen de inversión pública y privada.
Una economía al servicio de las personas
El impacto macroeconómico de la IA no debe medirse solo en puntos de PIB, sino en bienestar compartido. La tecnología será un éxito si consigue mejorar la vida cotidiana de las personas, crear empleo de calidad y reducir desigualdades.
España tiene la oportunidad de liderar un modelo alternativo: una economía digital justa, inclusiva y sostenible, donde la innovación se combine con la ética, y donde cada avance tecnológico refuerce la cohesión social. La IA puede ser un aliado del progreso si ponemos al ciudadano en el centro de la ecuación.